Temporada 2014: Resumen Final
El resumen de lo que fue la temporada 2014 para Marcelo Stones.
Cuando mi hijo Nicolás, a mediados de octubre, comenzó a convencerme de alquilar un departamento cerca del Conrad para hacer allí toda la temporada 2014. Tengo que reconocer que la idea no fue de mi agrado.
Sin embargo, el hecho de compartir momentos con el y seguir recuperando parte del tiempo que nos hicieron perder su mama y la justicia durante su infancia, hizo que sin dudar cambie mi habitual opción de Miami por la de Uruguay .
Fueron cuatro meses, desde el 17 de noviembre al 15 de marzo, a puro poker. Más de 900 horas grindeando las mesas de cash que dejaron en mis arcas bastante más de lo que vine a buscar.
Desde el inicio del viaje, todo transcurrió bajo los carriles normales. Sólo tuve que soportar un badbet en un pozo gigante que fue durante la primer semana. Después de eso, las manos grandes y más importantes fueron casi todas para mi lado.
El 24 y 25 de noviembre encadené mi primer racha de buenas victorias por un total de u$s 3,5 k, y luego del 6 al 8 de diciembre vino otra de $4 k.
El nuevo año me trajo días de buenas sesiones y cuando había terminado Enero me encontraba con una ganancia de casi $30 k en el total del viaje. El 29 de enero fue la sesión donde más gané, con un superávit de u$s 3500 en 14 horas de juego continuado.
Febrero siguió con los buenos vientos donde casi no hubo derrotas grandes, y con esa motivación seguí metiendo muchas horas por día.
Cuando finalizó el carnaval, el Casino Conrad hizo un clic y sólo hubo mesas en forma esporádica, pero igual daban ventaja y se podía seguir sumando.
A pesar de que para mi la temporada fue muy buena en resultados, para la mayoría de los regulares de Uruguay fue la peor de los últimos años. Esto fue un poco por que los turistas argentinos brillaron por su ausencia con un dólar por momentos a 13 pesos.
El costo de vida en Punta del Este llegó a ser más caro que en Londres. Muchos brasileños que siempre aparecían para esta época, decidieron que Miami era un mejor destino.
Y la decisión de no abrir mesas u$s 3-6 ( al final de la temporada dieron marcha atrás con la medida) y tener sólo mesas u$s 5-10, como la opción más económica, espanto a algunos jugadores recreacionales de niveles bajos.
Estos fueron a mi entender los tres motivos principales del porque el salón se veía generalmente raleado, nunca estuvo lleno como en otros años. Lo máximo fueron 7 mesas simultaneas y solo en algunas noches.
La mesa más cara de u$s 10-25 se abrió solamente la primer semana de enero un par de horas cada noche. Por mi parte, decidí evitarla.
No quise arriesgar a tener una mala noche en ese nivel, lo que podía significar varios días de trabajo en las que jugaba habitualmente.
Sobre todo, la decisión se basó en que no quería arriesgar a desmotivarme con una derrota dolorosa en el medio del viaje. Creo que fue acertado y profesional de mi parte.
No había apuro ni necesidad de subir varios escalones a la vez. Ademas, las mesas u$s 5-10 eran prácticamente sin riesgos para mi.
Un párrafo aparte, para los jefes y supervisores del Poker Room del Casino Conrad. En este viaje me sentí como un uruguayo mas por el trato cordial que me brindaron. Horacio, Carancho, Rafa, Fernando, Luis y Leonardo, me hicieron sentir local.
Ni hablar de la mayoría de los colegas profesionales uruguayos. Unos pibes sensacionales con los cuales compartí infinidad de cenas en «Lo Esencial» (restaurante que recomiendo, en Maldonado), donde la sobremesa era casi tan sabrosa como la comida.
El balance, como verán, fue altamente positivo, tanto en mi juego, como en experiencia de vida.
- Abrazo y buenas decisiones – MARCELO STONES