Quinta travesía a Macao
Relato de la quinta travesía a Macao de Marcelo Stones Betbesé.
Quinta travesía a Macao. Bastante tiempo atrás, allá por los años en donde los campos fértiles permitían comer en abundancia. Donde cualquier mesa cash de poker daba beneficios rápidos y jugosos.
Me atreví a pronosticar que había que sacarle el máximo provecho posible a esos días soñados.
Ya que según mi visión, no era posible que durase para siempre semejante bonanza.
¡Poker sin cesar!
Recuerdo que por aquellas épocas, realizaba un viaje tras otro, jugando sin descanso, el máximo de horas posibles, agradeciendo lo fácil que el dinero ingresaba en mis arcas.
Siempre aparecía un recreacional dispuesto a colaborar, dejando su stack para que yo lo administrara. ¡Que buenos tiempos aquellos!
Fui afortunado de haber tenido la claridad mental, para aprovecharlo al máximo y mantener los pies sobre la tierra al no salirme de mi línea de conducta ya fuera de la mesa.
La mayoría de las personas, al ver semejantes ingresos de dinero, puede perder la cabeza y derrocharlo fácilmente.
No voy a dar nombres, pero sé de docenas de casos que han ganado mucho más que yo, y hoy los veo pidiendo cualquier tipo de bancaje, para poder sentarse en una mesa de poker.
Todo lo bueno, tarde o temprano, se termina. Y en el Poker de hoy, aquellos tiempos ya no existen mas.
Mesas cada vez más difíciles, pero…
Este es mi quinto viaje a Macao, donde las mesas cada semestre se están poniendo más y más duras, llenas de regulares, cinco o seis por mesa, que saben a qué juegan y donde la ventaja solo aparece de vez en cuando.
Se preguntarán entonces: ¿A qué vuelvo, si las mesas están tan complicadas?
La respuesta es, que a pesar de eso, tienen una virtud muy grande. La mayoría de sus jugadores cargan entre 150 y 250 BB , lo que hace que las mesas estén llenas de fichas, y que cualquier error se pague con grandes sumas de dinero. Dinero que no se encuentra en otras partes del planeta.
Además considero que ya no quedan demasiados lugares conocidos que rindan frutos claros, para que valga la pena instalarse uno o dos meses, y Macao, a pesar de haber empeorado, aún sigue siendo rentable. Veremos por cuanto tiempo más.
Como siempre, haré todo lo posible por seguir dando batalla: habrá que ser profesional al máximo y meterle horas y sacrificio a este viaje que durará 40 días.
Luego vendrá un relax de 15 días, seguido por mi octava serie mundial WSOP consecutiva en Las Vegas. Espero que los dioses del Poker me acompañen, para ayudarme a tomar la mayor cantidad de buenas decisiones posibles.
Abrazo.
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