WSOP 2012 – Peregrinación a la Meca del poker – Final

Fernando Gatto 20 julio, 2012

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Miami, EEUU – Enviado Especial.- Este gran viaje para Pokerlogia.com llegó a su fin, y en su desarrollo viví muchas anécdotas y experiencias enriquecedoras que me gustaría compartir con Uds. La idea era hacerlo casi en directo, pero las circunstancias y la necesidad de maximizar las vivencias dejaron para diferido este relato resumido.
Para llevar una cronología, les cuento que en el aeropuerto de Ezeiza el póker se hizo presente de la mano de Diego Madrigali, a quien encontré ocasionalmente allí y con quien compartí unas horas actualizando nuestros presentes. Fue grato recordar anécdotas con esta excelente persona y jugador de Rosario. Luego de este encuentro nos separamos, y él se fue a Las Vegas y yo a New York para mi escala previa, donde descansé y me recargué para lo que vendría a partir del 02 de julio.
Y así fue que para esa fecha arribé a Las Vegas McCarran International Airport, donde realice los pasos sugeridos por Marcelo “Stones” Betbese e Ignacio Palau, tomando la combi que te lleva al Hotel por 7 u$s (un taxi desde allí te sale 25/30 u$s). Mi estadía estaba programada en el Imperial Palace Hotel & Casino, y Marcelo Stones estaría en ese momento comenzando a jugar el Evento #56 de la WSOP 2012, así que siguiendo con el plan dejé el equipaje en el guarda bultos del hotel, -es gratis, solo le das 1 u$s de propina al que este ahí-.
Ya con una carga menos, me fui caminando al hotel adjunto, –el Harrads– y de allí hasta el fondo donde sale una combi gratis -shuttle- cada 30 minutos con destino al Rio & Casino Hotel. Con todo sobre ruedas, me encontré en breve en los pasillos de la catedral del póker- El Rio-, y en solo metros me topé con Marcelo Stones y German Poncio, que se encontraban intercambiando información sobre temas varias dentro del póker. Allí, en un breve pero emotivo abrazo, se selló nuestro encuentro y rápidamente comenzó mi misión de seguirlo en la jornada.
Me dirigí a la sala de prensa y Marcelo a jugar el Evento #56 en el cual pasaría posteriormente al DIA 2 y cobraría la suma de u$s 4155 por llegar al puesto 113.

Al terminar ese evento y en la semana previa al Main Event, nos trasladamos desde el Casino Rio (donde solo se juega WSOP) al Casino Treasure Island, que cuenta con un acogedor poker room con una promoción ineludible (Rake Back semanal con tope máximo de 60 horas por 600 u$s). Allí trascurrimos muchas horas del día, gracias a la excelente hospitalidad de sus encargados Isaac Khalil y Kurt Browning que ya conocían a Marcelo de sus records de sesiones de cash en el Planet Hollywood.
Era difícil cambiar de “oficina” como le dice Stones, por que además del rake back la sala te ofrece 2 u$s por hora para canjearlos en su excelente y completo buffet a solo metros del poker room, y para redondear Wifi y bebidas gratis mientras jugás. Un combo que hizo de esta “Isla del Tesoro” el lugar donde cualquiera que quisiera encontrarnos a cualquier hora, lo haría.
En las sesiones de cash estuve sentado en la misma mesa que Marcelo para corregir mis errores y nutrirme de sus virtudes. Este fue el ejercicio más enriquecedor de este viaje, con conversaciones pre y post sesión. En esta “dialéctica”, logré progresar muchísimo dentro y fuera de la mesa en lo que se refiere a “ser un profesional”.
Las sesiones se fueron acumulando y casi sin darme cuenta nos depositaron en el DIA 1 C del Main Event de la WSOP, donde cambie el traje de jugador por el de periodista para seguir de cerca el evento y los jugadores Argentinos.
Marcelo logró sortear los DIAS 1, 2, 3 y 4 con buen timing y con la mente fija en el primer objetivo, entrar en cobros. La tarea no fue fácil en el DIA 4 en la mesa televisada a la izquierda de Vanessa Selbst que finalmente lo eliminaría del torneo en el puesto 541 con un premio de u$s 21.707. Así, Marcelo lograba su 6to cobro en su historial de WSOP. Mucha gente se solidarizo con Marcelo por el hecho ocurrido con el otro medio de argentina que estaba informando desde Las Vegas. Esto marcará un antes y un después entre dos visiones antagónicas de esta disciplina. Esto es claro, el tiempo esta acomodando a cada uno en el lugar que le corresponde.
Para coronar el cobro del Main Event, recibimos la visita de otro amigo, Mariano, con quien disfrutamos unos días de esparcimiento en los outlets, el viejo Down Town, y cenas varias. Y en este ultimo rubro, debemos destacar el resto Manggiano´s Little Italy, un bistro italiano con excelente ambiente y atención, donde por 25 u$s por persona podes cenar con vista al Strip frente a los casinos Venetian, Wynn y Encore, una parada obligada.
En relación a los outlets, hay dos de la misma marca y son Los Premium Outlets en sus dos versiones, South y North, inclinándonos por la del sur cerca del aeropuerto internacional por tener una galería interna con aire acondicionado que hace que los 40° de calor desaparezcan a la hora de elegir los mejores precios de marcas como Gap, Tommy, Polo, Adidas, Reebook, ect. Para electrónicos, debes ir a Best Bay, una gran tienda de electrónicos que nos recomendó Aníbal Andrés un experto en la materia.
También en este viaje, conocí a dos compañeros de ruta de Marcelo Stones que también “ejercieron” en Miami previo a WSOP, ellos son Fabricio Schaffrath y Nacho Pacifico, dos profesionales que se toman con mucho profesionalismo esta disciplina.
Ahora me encuentro en el aeropuerto de Miami, apunto de abordar mi avión con destino a Buenos Aires, mi viaje se esta por terminar y me queda una sensación motivadora, la de haber alcanzado otro objetivo más, uno muy importante que casi sin saberlo me había propuesto antes de viajar a la WSOP 2009 siempre financiado por mis propios recursos.
Ese objetivo fue dejar que la pasión por esta disciplina me guie sin medida. Ahora puedo decir con seguridad que me esta llevando a donde siempre quise, a ser un jugador profesional de póker, a vivir pura y exclusivamente de esto. De la mano de Marcelo Stones y acompañado por Javier Sosa – incondicional y mi contemporáneo en este camino-, son los condimentos imprescindibles para no claudicar y seguir consolidando esta filosofía ganadora que empieza y termina mas allá de una mesa de póker.